Qué es un mentor y cómo puedes encontrar uno en 5 pasos
Desarrollarse profesional y personalmente es una cuestión que todos perseguimos y nos preocupa. La mayoría de nosotros siempre estamos pensando la manera de ser mejores y superarnos a nosotros mismos.
Sin embargo, como probablemente sepas, no estamos solos, y hace falta rodearse de gente brillante y con más experiencia que tú para que puedas absorber todo ese nuevo conocimiento y hacerlo tuyo.
A pesar de que la mayoría de la gente piensa que es beneficioso tener un mentor, realmente pocos son los que saben buscar uno y crear esta estrecha relación de confianza.
El secreto de mi éxito fue rodearme de personas mejores que yo – Andrew Carnegie
En el post de hoy quiero hablar sobre la mentoría, cómo funciona y por qué puede ayudarte a mejorar y crecer tanto en el trabajo, como en la vida profesional. Buscar un mentor no es fácil, pero una vez que se encuentra, se crea una relación muy fuerte en la que ambas partes ganan y se nutren bidireccionalmente.
¿Qué es un mentor?
Esta es la primera pregunta que deberíamos plantearnos. ¿Qué es lo que hace un mentor y cómo puede ayudarme?
La mentoría consiste en una relación profesional mutua, en la cual un profesional con más experiencia y conocimiento (el mentor) comparte toda esa sabiduría con otro profesional menos experienciado (el aprendiz).
Un mentor es alguien que puede hacer el papel de guía, que te anima a conseguir nuevas oportunidades, te propone retos para que demuestres tus conocimientos, y te conduce a situaciones en las que tienes que imaginar distintas soluciones y llevarlas a cabo.
La mayoría de las veces el mentor va a pertenecer a tu misma industria o sector, o que desempeña el mismo rol que tú. Aunque puede darse el caso de que un mentor esté en el mismo escalón jerárquico que tú, normalmente suelen estar por encima y ocupar puestos de mayor responsabilidad.
¿Cómo encontrar el mentor adecuado para ti?
Una vez que hemos visto qué es un mentor, voy a darte cinco consejos para encontrar la mejor persona que se adapte a ti y puedas sacar provecho de toda su sabiduría y experiencia.
1. TEN CLARO TUS OBJETIVOS
Lo primero que debes hacer antes de empezar a buscar un mentor es saber que es lo que quieres hacer con tu carrera.
Con esto no estoy diciendo que ya tengas que averiguar lo que quieres hacer durante toda tu carrera profesional ( de hecho, yo siempre digo que hay que dejar espacio para aquello que pueda surgir por el camino), sin embargo, conocer qué es lo que profesionalmente quieres a corto plazo te ayudará a definir mucho mejor el tipo de persona que necesitas a tu lado. Márcate unos objetivos e intenta enfocarte en ellos.
2. ENCUENTRA A LA PERSONA ADECUADA
Este es uno de los factores más delicados, pero a la vez más importantes de todo el proceso. Antes de elegir la persona que quieres que sea tu mentor, haz una investigación exhaustiva de tu red de contacto y evalúa los pros y contras que te puede suponer elegir a un profesional u otro.
Una vez que ya has hecho una investigación previa de lo que quieres conseguir, mira a tu alrededor. Fíjate en tus compañeros, jefes, amigos, compañeros de estudios…
Investiga sobre lo que hacen, cuáles son sus competencias y cómo podrían ayudarte a ti. Piensa que el mentor es alguien al que te gustaría parecerte, por lo que debes conocerlo muy bien y saber cómo te puede ayudar.
Aunque creas que esto debe ser fruto de la casualidad, seguro que hay algo que ha hecho que lleguéis a ese punto de entendimiento.
Como dice una de las personas más sabias del sector asegurador, Pepe Ruíz Hortelano, lo importante es reconocer a los que no te aportan, de esta manera te quedas con los buenos.
3. TEN EN CUENTA DIFERENTES PERSPECTIVAS
La respuesta es sí, puedes tener más de un mentor. Si perteneces a una empresa grande con diferentes departamentos, puedes encontrar mentores de diferentes ramas y que te ofrezcan una perspectiva única de cada situación: finanzas, contabilidad, marketing…La idea es »aprender de alguien que se dedique algo diferente a mí».
Es una buena manera de abrir tu mente y ampliar tu conocimiento sobre diferentes materias.
4. SÉ HUMILDE
Esta relación debe basarse en el respeto, la comunicación y la gratitud. Al fin y al cabo, si una persona acepta ser tu mentor, está aceptando compartir todo su conocimiento contigo, ayudarte en todo lo que pueda y resolver las dudas que te vayan surgiendo por el camino.
Es por eso que debes estar dispuesto a escuchar, a reconocer que puedes equivocarte y sacar tu lado más humano para crear una relación basada en la confianza.
Es de bien nacido ser agradecido, reconócele su labor con amabilidad, respeto y gratitud.
5. NUTRE LA RELACIÓN
Mientras mejor sea la relación que formes con tu mejor, mayores posibilidades de llegar a ser como él tendrás en un futuro.
Para esto, hace falta confianza y tiempo, pero una vez se consiga, las dos partes se sentirán muy satisfechas con su relación. Como todas las relaciones hace falta cuidarla y protegerla. Para eso puedes mostrarle los progresos que has realizado gracias a sus consejos, preguntarle dudas sobre temas concretos, no llegar tarde a vuestras reuniones…
Tus mentores se nutren igualmente con tu experiencia, seguro que le aportas algo que le hace sentirse a gusto en vuestra relación, aunque sea un chiste de vez en cuando 😉
Como has podido comprobar, elegir un mentor es una de las mejores oportunidades que tenemos para crecer y desarrollarnos como profesionales. No importa la edad que tengas, sino la predisposición, ganas de aprender y escuchar a otras personas que son grandes profesionales en su trabajo.
El éxito no es el único atributo que debes buscar a la hora de elegir un mentor, sino mirar más profundamente, y comprobar que los valores, formas de trabajar y soft skills de esa persona son las que te gustaría conseguir en un futuro, y reconocer si esa persona puede ayudarte a conseguirlas.
No puedo terminar este artículo sin mencionar a dos de mis mentores a lo largo de mi carrera profesional, Enrique Fernández y Javier Sierra ¡¡Gracias!!